Desde Cañete-Lima-Perú

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"...Ojalá se te acabe la mirada constante, la palabra precisa, la sonrisa perfecta. Ojalá pase algo que te borre de pronto: una luz cegadora, un disparo de nievek. Ojalá por lo menos que me lleve la muerte, para no verte tanto, para no verte siempre en todos los segundos, en todas las visiones: ojalá que no pueda tocarte ni en canciones...". Silvio Rodríguez.

miércoles, 28 de febrero de 2007

¿Qué vamos a hacer?


Qué vamos a hacer si de este amor no se pudo hacer mas,
qué vamos a hacer con tantos sueños compartidos,
con todo este tiempo perdido,
¿acaso hemos de hacer un cuento de esta historia?
qué voy a hacer con tu olor entre mis sábanas,
y que harás tú con mis zapatos debajo de tu cama,
¿acaso hemos de atarnos por una ilusión que ya se ha muerto?
y qué voy a hacer con tus hojas y tus fantasías,
¿y quemaras tú mis libros de poesía?
¿acaso este lúgubre momento tiene un momento de placer?
¿será acaso que caminando lejos, tu y yo nos volveremos ver?


jueves, 22 de febrero de 2007

Amores imposibles


No existen los amores imposibles,
existen los días grises y las noches solitarias,
son ellos mas nuestros que nosotros mismos ,
a veces los sentimos, nos vemos alejarnos,
pero son esos amores innegables
los que el corazón mantienen palpitando.

No existen los amores imposibles
existen las personas intocables,
existen los corazones ciegos
y existen las bocas muy cerradas,
a veces somos nosotros, o los otros,
o el amor, o el tiempo, o nada.

jueves, 1 de febrero de 2007

Te espero


Cómo hacerte entender que esos minutos,
que ese momento me cambió la vida...

Resulta que tienes ese brillo especial de las seis de la tarde,
el brillo de todo se va a mejorar y yo no diré nada,
es como si un halo de tranquilidad
se posara sobre el absurdo eterno de tu frente.

Debe ser el encanto matutino
lo que vuelve adictiva tu sonrisa,
es mirar y saber que se ha perdido todo
y que tú sigues dándole fuerzas a mi mundo.

Son como las nueve y treinta de la noche
y te espero aunque se que no vendrás,
debe ser la emoción de saberte siempre cerca
porque se que volverás.